El Takanakuy es una celebración que se realiza en los alrededores de la provincia de Chumbivilcas cada fin de año, en una fecha diferente en cada pueblo. En algunos, como en Santo Tomás, el mismo día de navidad. En esa fiesta los hombres pactan peleas para solucionar los asuntos pendientes de ese año, y a la vista de todos cada pareja se turna para agarrarse a golpes hasta la primera sangre, dejando por terminados sus rencores.
A diferencia de cualquier pelea profesional, aquí nadie está entrenado en controlar sus emociones, ni en mantener la cabeza fria para tomar ventaja de ello. Aquí cada golpe se lanza con el alma como si fuera el último. Al aislar a los peleadores de su contexto, además de marcar la sincronización de sus cuerpos en una danza salvaje, que termina siempre en formas inusuales, podemos poner el ojo en su ira, en su dolor, y en su miedo.
A diferencia de cualquier pelea profesional, aquí nadie está entrenado en controlar sus emociones, ni en mantener la cabeza fria para tomar ventaja de ello. Aquí cada golpe se lanza con el alma como si fuera el último. Al aislar a los peleadores de su contexto, además de marcar la sincronización de sus cuerpos en una danza salvaje, que termina siempre en formas inusuales, podemos poner el ojo en su ira, en su dolor, y en su miedo.













